¿Que son las alergias?
Las alergias son síntomas de la piel y las mucosas como erupciones y picazón, en general reiterados, por ejemplo, estornudos, rinitis,
hinchazón y picazón de los párpados entre los mas frecuentes. Se trata de una
distorsión de la energía vital que responde de un modo exagerado a distintos
estímulos. El remedio homeopático ayuda a equilibrar la energía vital, y de
esta manera la hipersensibilidad desaparece, manteniendo lo que es importante,
la fuerza y la reactividad normal del organismo.
Formas de administrar el remedio homeopático
¿Que es una dosis única?
Una dosis única es el modo clásico de administrar el
medicamento homeopático.
Puede ser preparado embebido en polvo de lactosa dentro de un
papel o en glóbulos en una administración por única vez.
La homeopatía actúa de un modo distinto al de la medicina a
la que estamos habituados o alopatía. El remedio homeopático adecuado promueve
un estímulo corrigiendo el desorden en la energía vital y no es necesario
repetir las dosis por un buen tiempo, en ocasiones semanas o meses de acuerdo a
la patología del paciente.
¿Qué son las dosis en agua?
Existe también la forma de administrar el remedio en agua o
agua con alcohol (en una mínima proporción para sostener el remedio), lo que se
conoce como método plus.
Es un modo frecuente en la prescripción del remedio
homeopático y en ocasiones se usa indistintamente respecto a las dosis únicas.
Muchos pacientes se sienten mas seguros si toman las dosis en agua en un frasco
gotero de manera diaria porque responde mejor a las pautas de la cultura
habitual de la medicina.
Este método requiere simplemente dar una serie de golpecitos
al frasco en su base contra la palma de la mano antes de cada toma del remedio.
Estos golpecitos se los conoce como sucusión y colabora a la acción del
remedio, modificando sutilmente la potencia de una toma a la otra. Tengamos
presente que la sucusión forma parte importante del proceso de preparación de
todo remedio homeopático.
En ocasiones algunos homeópatas indican dosis repetidas de
glóbulos diariamente.
Hahnemann desaconsejó concretamente hacerlo pudiendo en
ocasiones traer agravaciones u otros inconvenientes clínicos, enfatizando la
utilización del método plus es decir dosis repetidas, pero en agua, con las
sucusiones correspondientes (parágrafo del Organon 247).
El cuestionamiento a las dosis infinitesimales
Las dosis infinitesimal
Las dosis infinitesimales son un aspecto original y
seguramente lo mas cuestionado de la homeopatía.
La posibilidad de comprender cómo actúan las dosis
infinitesimales ha resultado hasta el momento un misterio, y a pesar de ello la
comprobación clínica resulta su principal respaldo.
No sabemos qué pasa exactamente a ese nivel, ni en
definitiva que inspiró a Hahnemann a tan peculiar sistema de preparación del
remedio.
En la preparación del medicamento Hahnemann daba principal
jerarquía a la trituración y fricción inicial en mortero de la substancia y a
las posteriores sucusiones a las que se sometía las progresivas diluciones de
la substancia original en agua.
Hahnemann señala que desconocía el mecanismo intrínseco por
el cual actuaban estas dinamizaciones, pero a modo de hipótesis plantea una
semejanza con el poder del magnetismo que se despierta en una barra de hierro
inerte al ser frotada contra otra. De igual modo, la fricción mecánica y
sucusión de la substancia medicinal despierta propiedades que no estaban
presentes en su estado crudo natural, concibiendo algo semejante a un
magnetismo o propiedad particular a la que resulta sensible la energía del ser
viviente.
Siendo aun terreno de hipótesis, las teorías y explicaciones
actuales apuntan en una dirección: el agua. La aparente sencillez de su
estructura como solvente, no es en realidad tal, y este líquido esencial para
la vida encierra muchos mas secretos y propiedades de las que habitualmente se
le otorgan.
Ya no sería rigurosamente necesaria la presencia del soluto,
como lo estima el concepto clásico del número de Abogadro, en revisión también
desde algunos enfoques de la ciencia, por el cual luego de cierta serie de
diluciones no existiría molécula de la substancia original en el agua.
El fenómeno se traslada ahora a la estructura interna del
agua, como si de un tejido se tratara, capaz de reproducir a modo de un calco,
la imagen de moléculas que ha recepcionado anteriormente aunque ya no estén
presentes, e implícito en este reflejo, el mensaje de la substancia original.
El planteo actual se traslada a la recepción de un mensaje
cuya información se encripta y circula en el agua, de la que el ser humano
tiene mas de un 70 % de su peso, despertando en su energía vital un código
particular de actividad curativa.
Se ha mencionado muchas veces, el medicamento homeopático
apunta a desplegar los propios recursos curativos presentes en el organismo. Se
trata de un mensaje, una orden para que se pongan en actividad.
Luc Montagnier, premio Nóbel de medicina, entre otros, se
refiere en términos cercanos a estos conceptos.
No es la substancia la faltante para el proceso curativo en
buena parte de las enfermedades; en realidad es la información que se despliega
en el organismo lo central a tener en cuenta en esta dinámica vital.